el otro día leí en la revista francesa Elle que una de las novedades parisinas de la temporada son los bastones de caramelo de la foto, obra de la nariz Olivia Giacobetti y el pastelero Philippe Conticini, de La pâtisserie des rêves (si sois golosos, no entréis en su página: es toda una tentación que, por
comer uno tiene que ser como los besos que nos daba mamá de pequeños.
y me puse a pensar qué otros sabores tienen para mí las cosas: a cacao y galletas de canela, la primera Noche de Reyes; a chicle de menta, el primer beso de un chico; a sándwich de pepino, la primera experiencia de libertad; a helado de pistacho, una puesta de sol de verano; a té Earl Grey, el instante en que me di cuenta de que me hacía mayor; a café con leche, los momentos que comparto con vosotros…
¿os atrevéis a poneros cursis y contarme vuestros sabores? ;o)
(la foto es un chupimontaje de la que aparecía presentando los bastoncitos en la revista Elle, n.º 3425, del 19 de agosto de 2011).
2 comentarios:
Qué maravilla, tan maravillosa, quién va a ir a París próximamente??,porq necesito un puñado ya, si, si, lo necesito....
pero que original que eres???? me chifan esos sabores, yo tengo una botellita pequenita con forma de osito de cuando yo nací de la marca Avon.... nunca me la he puesto pues cada vez que iba a casa de mi abuela la abria ppara olerla y así siempre imaginé que olia el nacimiento d euna persona.Han pasado muchos muchos anyos y ahora la botellita la tengo en casa vacia, con unas gotas del aceite que queda y no te negaré que de vez en cuando la abro y me transporta a mi infancia!
Publicar un comentario