lo cierto es que no he leído jamás a Sontag, lo que no impide que adore todas las fotos en las que se la ve, supuestamente, trabajando. el disfraz de osito inspiró a un amigo a regalarme uno para traducir. y, ahora que he descubierto dónde puedo encontrar esa maravillosa taza de calicó azul, siento que podría ser todo lo que necesito para desbloquear mi mente cansada ya en este mayo de 2021.
seguramente, no. seguramente hace falta algo más. esa taza, no obstante, sigue haciéndome ojitos.
¿resistiré a la tentación? no es probable. ya he dicho que estoy cansada... y ¡es tan bonita!
al menos, espero que me inspire. aunque tenga que llenarla varias veces de café.
eso sí, no me va a quedar más remedio que leer a Sontag. ¿me recomendáis algo en especial?