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martes, 28 de junio de 2022

nadar



animales acuáticos. 

somos un 70 % agua y procedemos de ella, así que no puede ser una casualidad que nos llame la atención el mar, que nos calme, que nos guste nadar, que busquemos el contacto del agua en el cuerpo (incluso en una piscina), la ingravidez que nos proporciona flotar en ella, la calma del sonido amortiguado (el silencio, pese a todo el ruido alrededor), la sensación de estar estirando la columna, la mirada perdida en la línea azul y los pensamientos vagando por lugares inexplorados. nadar: la mejor meditación, el mejor momento para idear nuevos planes. 

y ver nadar. porque también ver la eficiencia de un cuerpo avanzando en el agua es calmante. ¿y la natación sincronizada? ¿cuánto relaja los sentidos ver una serie de cuerpos moviéndose en perfectas coreografías? es un poco como cuando, de pequeños, nos fascinan las hormigas avanzando en fila india hacia sus hormigueros, o esas flores que parecen pequeños ramitos perfectamente simétricos (lantanas), o los enanitos de Blancanieves con todos sus «hi-ho». ay, creo que me he ido por las ramas, pero ya entendéis lo que quiero decir...

en fin, espero haberos convencido de las ventajas de nadar, pero, por si no, quizá lo haga este libro

(foto).

martes, 21 de junio de 2022

la pedicura


una buena pedicura. 

ya os decía el martes pasado que pensaba en estos hedonismos míos mientras me hacían la pedicura. lo normal es que me la haga en casa. un momento que, como decía Anabel Vázquez el otro día, permite concentrarse en el proceso hasta olvidar la angustia de la vida. limar las uñas, exfoliar, retirar cutículas, hidratar, pintar... tiene algo de zen. 

pero, de vez en cuando, hace falta también dejar que te la hagan. media hora, cuarenta minutos, una hora de desconexión, en la que a media luz alguien te cuida mientras tu mente divaga por las playas del Caribe. es una buena solución si no puedes ir de verdad. y todos necesitamos estas pequeñas desconexiones. aunque la tuya puede no ser una pedicura. ¿quizá un masaje? ¿un corte de pelo? ¿una excursión a ver el mar fluir sin hacer nada? ¿un paseo por el parque con un buen podcast en las orejas u oyendo el sonido de los pájaros? no sé, cada uno que busque el suyo. ¿yo? los tengo todos.  
 
¿cuál es vuestra pequeña desconexión favorita?

(foto de Garance Doré).

martes, 14 de junio de 2022

hedonismos



mi padre tiene algo de protestante. es de esas personas que cree en el sufrimiento. que te consolará si lloras, pero estará pensando en lo mucho que eso te va a fortalecer el carácter y lo bien que te va a sentar. 

¿yo? yo no soy así. lo he contado antes de otras formas, pero yo soy alguien que cree en la felicidad. la felicidad es algo íntegro, vigorizante y cálido, que nos permite ser más compasivos con los demás, nos hace más amables, más cariñosos. creo que estamos aquí para ser felices y que debemos aceptar toda felicidad que se nos ofrece con gratitud, tanta más cuando se nos ofrece a veces más de la que merecemos. 

esto estaba pensando yo el otro día mientras me hacían la pedicura. apasionante, ¿no? y, sin embargo, todo esto me llevaba a los pequeños hedonismos que voy acumulando para contaros, a la felicidad que me da enviar al mundo mis pensamientos ínfimos por si a alguien le animan o inspiran, y a cómo debería hacerlo, intentarlo al menos, este verano con breves postales selladas con un beso que dejar que lleguen a vuestro mundo y que espero que contestéis si queréis. 

así pues. esperadme. creo que de esta lo conseguimos. mis hedonismos para vosotros, por aquí, a partir del 21 de junio, día en que estrenamos el verano <3

(la imagen es Dulce verano, de Waterhouse).

viernes, 3 de junio de 2022

junio



así pinta junio de 2022:

en la mesilla, un título jocoso.

en la nuca, papaya.

sobre los hombros, un chal ruso de hace mil años.

bajo la falda, este bañador

en los labios, almendrados.

en casa, rayitos de sol.

para dormir, sábanas amarillas.

en el bolso, un básico para el calor.

en la mente, aún Cadaqués (dentro de unos días ya).

en la calle, el verano a la vuelta de la esquina.

en la mochila, proyectos preciosos.

en todas partes, astenia y ganas de vacaciones.

(foto).