Ayer, al llegar a casa, del buzón abarrotado de folletos y sucedáneos, asomaba mi nombre escrito del puño y letra de alguien. ¡Oh oh oh sorpresa!!!!! Casi me desmayo de emoción mayúscula... No podía creer que alguien, hoy en día, se acordara de lo que era un sobre de verdad, un boli de verdad y de que un nombre se escribe con letra capital al igual que su correspondiente apellido. Pero qué ilusión Itziar. En serio. Si te cuento las vueltas que dio la vida desde que debiste grabar mi dirección en tu Excel de organizadora de intercambios, te mueres. Pero las casualidades nos hacen encontrarnos otra vez. Quisiera escribirte en privado pero el icono de correo sólo me lleva al Outlook y no veo tu mail. Mil millones de gracias por ese sobre plateado con esa cosita preciosa dentro. Quizás ha sido el detonante para que retome mi vida bloguera, abandonada en silencio desde hace meses y meses... Gracias por el impulso. Un abrazo muy muy fuerte!
Yo los pantalones blancos los visualizo con camiseta de rayas, aunque reconozco que a otros ojos el conjunto es un "háblame del mar marinero".
ResponderEliminarLos pantalones blancos son el comodín...se dejan llevar con todo ;))
ResponderEliminarAyer, al llegar a casa, del buzón abarrotado de folletos y sucedáneos, asomaba mi nombre escrito del puño y letra de alguien. ¡Oh oh oh sorpresa!!!!! Casi me desmayo de emoción mayúscula... No podía creer que alguien, hoy en día, se acordara de lo que era un sobre de verdad, un boli de verdad y de que un nombre se escribe con letra capital al igual que su correspondiente apellido.
ResponderEliminarPero qué ilusión Itziar. En serio. Si te cuento las vueltas que dio la vida desde que debiste grabar mi dirección en tu Excel de organizadora de intercambios, te mueres. Pero las casualidades nos hacen encontrarnos otra vez. Quisiera escribirte en privado pero el icono de correo sólo me lleva al Outlook y no veo tu mail.
Mil millones de gracias por ese sobre plateado con esa cosita preciosa dentro.
Quizás ha sido el detonante para que retome mi vida bloguera, abandonada en silencio desde hace meses y meses... Gracias por el impulso.
Un abrazo muy muy fuerte!