cambia esa cara

¿habéis oído hablar de este reto para dejar de refunfuñar en 21 días (al parecer, este es el tiempo que se tarda en cambiar un hábito)?
funciona así:

«para empezar, debes ponerte una pulsera que te recordará el compromiso con el reto. comienza tu jornada y, cada vez que te sorprendas refunfuñando por algo (el tiempo, la taza de café que tu marido ha dejado sin lavar en el fregadero, los cereales que se acabaron los niños sin avisar, la compañera de trabajo que escucha música a todo trapo…), cambia de muñeca la pulsera (de la derecha a la izquierda, o viceversa). no te preocupes demasiado si, durante los primeros días, no deja de saltar de mano. cada vez que cambias la pulsera de muñeca, la cuenta comienza desde cero. el reto es difícil, es cierto, pero también es verdad que intentarlo abre la puerta a más felicidad, más apreciación por los pequeños placeres de la vida, y a la creación de un mundo mejor».

el caso es que lo he recordado al ver que habían traducido al español el libro de la autora del blog:

y me he dicho: ¿por qué no intentarlo? así, a lo mejor, algún caballero que otro deja de pensar que soy una quejica.
y, de todas formas, me encantan estas cosas… todo sea por probarme :o)

esta es mi pulsera. ¡ea! ¿me acompañáis? seguro que el viaje merece la pena.