martes por Murcia

al final de Trapería, está la plaza de Sto. Domingo, en la que se puede disfrutar de un helado cuando el calor deja de apretar. es verdad que últimamente han abierto un par de heladerías de esas que hacen sus productos con yogur y que no las conozco, pero creo que sigo prefiriendo (es lamentable, lo sé) la de Häagen-Dazs, cara y extranjera, pero con los helados más ricos del mundo. ¿quién puede resistirse a esto?

este ficus lleva en medio de la plaza desde 1893 y mide más de 30 m.
dicen que bajo sus raíces hay un refugio antiaéreo de hormigón de la Guerra Civil y que, por eso, sus raíces no pueden tener un crecimiento normal. sea como sea, es tan parte del paisaje que, cuando hace unos años arreglaron la plaza y quisieron quitarlo, los vecinos protestaron hasta conseguir que ocupase el lugar de honor que ahora tiene.

en el plano monumental, en la plaza está la iglesia de Sto. Domingo (s. XVIII). y a su izquierda el Arco de Sto. Domingo, que lleva a la plaza del Teatro Romea, de la que os hablaré ya la semana que viene. aunque, antes de marcharnos, no puedo dejar de presentaros la maravillosa tienda de Óscar, al que os he nombrado mil veces ya.

se trata de Le Mien y, además de vestidos preciosos, tiene unos accesorios divinos y cosas monísimas para casa. nada típico de Murcia de por sí, pero todo taaaan bonito :o). ¡no podéis dejar de visitarla!

(las fotos son: 1 y 3 de Joaquín Zamora; 2 de mi amigo c.; y 4 de Le Mien).