los cabezones

los que me seguís en Instagram sabéis que el sábado pasado fui a ver la exposición Superhéroes con Ñ (¡tenéis hasta principios de junio para verla!) y me enamoré de los Cabezones de Enrique Vegas. tanto que no pude evitar caer en la tentación y comprar su última obra, Los Cabezones de las Galaxias:

y el amor aún no se ha disipado. Lucas, la princesa Celia, Juan Solo y Obiguan Cagón son lo más. absolutamente recomendados todos ellos. los adoro <3

primavera en el salón

seguramente no me lo puedo permitir, pero este papel pintado es maravilloso. 

por cierto, ¿sabe alguien dónde puedo conseguir una rama de cerezo para decorar mi salón?

la santísima trinidad del ramen: caldo, fideos y topping

                             

parece que el ramen está de moda. y, a pesar de que yo soy un poco Mafalda, no he podido librarme de él… hasta un par de veces esta semana pasada.
¿mi veredicto? pues me gustan los localcitos en los que lo sirven, la cosa de comer sopa con palillos y el hecho de que puedes hacer una comida de día completo con un solo bol.
eso sí, ¡qué sed da! y, bueno, mi Mafalda sigue sin ser muy fan de la sopa, pero estaría dispuesta a repetir.

¿los locales en los que estuve? 

al parecer, los dos vienen con recomendación: son Ramen Jun, en Fráncfort, y Ra-men Kagura, en Madrid. y ambos me gustaron muchísimo. eso sí, no se puede reservar y suele haber cola para ambos, así que compensa llegar pronto a cenar. ¿más detalles sobre esta sopa? podéis leer el artículo de El Comidista aquí.

(foto).

lips

la primavera ha llegado y podemos quitarnos los zapatones de invierno. quiero unos que digan besos para todos. y que sean rojos, porque unos zapatos rojos, ya sabemos, te llevan a cualquier parte.

buen fin de semana de descanso y buenas lecturas

ha sido una buena semana: he disfrutado de tiempo libre, he leído, visto amigos y terminará bien. esta noche voy al teatro y el domingo buscaré huevos de Pascua. ¿qué más puedo pedir? bueno, si puede ser, que el martes tarde un poquito en llegar: no quiero ir al cole :o/

que paséis un buen fin de semana.

xo

(imagen).

a veces se nos olvida…

pero todos estamos en el mismo barco y no somos tan distintos.

solo hay un tipo de gente: gente.

(imagen del IG de Obvious State).

rosa ayer y hoy

va a ser que me van los colores intensos. y no, no es un secreto que me gustan los sofás rosas, pero lo que tengo claro es que me alegra que Elle siga pensando que el rosa está de moda en casa. y que quiero ese salón en el que se puede bailar el vals… aunque los sueños, sueños sean.

bálsamo para corazones rotos

si funciona, todos deberíamos tener este bálsamo en el botiquín. porque nunca se sabe cuándo puede hacer falta. enriquecido con plantas de virtudes calmantes, cuida y cura los corazones rotos. la violeta alivia la pena, mitiga la ira y ayuda a ver la ternura en los demás. el espino blanco ayuda a dejar atrás las emociones y los apegos poco constructivos. en caso de necesidad, extender el bálsamo con cuidado y cariño sobre el corazón.

y parece que hoy nos va a hacer falta, sí.

jefa en Brooklyn

el otro día vi la película El becario [The Intern] y adoré el estilo de Anne Hathaway. me pareció elegante, sencillo, fácil de imitar y, sobre todo, femenino sin dejar de ser práctico, algo que ando necesitando siempre.
tanto que no sé si pensar que tengo siempre el problema de querer ser otra vistiendo. bueno, y total, si es así, ¿qué más da? si puede ser, ¿por qué no esta mujer?

desconexión… o no

me he venido a Fráncfort a pasar unos días. la idea era descansar, desconectar, hablar alemán hasta con las piedras (que se pierde el idioma, señores, se pierde) y procurar ver el ordenador lo justo. peeero… no solo tengo cosas que no puedo postergar más, es que este pequeño descanso podría, quizá, permitirme pasar un poco más por aquí… y ¿cómo resistir tal tentación?

pues eso, que estoy en FFM y que no prometo nada.

disfrutadme el fin de semana y ya iremos viendo. 

xo

(foto de GD).

esnob telefónica

mi teléfono está muriendo y yo necesito uno nuevo, supongo. el caso es que estoy un poco cansada de la conectividad, del wasap, los correos a todas horas y la conexión en general. ya, ya lo sé, sueno esnob, jíster y culturreta. pero es lo que hay. y, además, la iniciativa y los diseños de Punkt son tan bonitos, que no veo la forma de resistirme. ¿cómo lo veis? ¿wasap sí o no? y ¿quedaré fatal si me decido, por fin, por un teléfono que no reciba nada más que llamadas y mensajes de texto?

editado para decir: no, no fui capaz. vuelvo a tener un smartphone. puede que el próximo…

el método de la cebolla

ahora que vuelvo a vivir inviernos, recuerdo los problemas de ir hiperabrigada y llegar a un sitio con calefacción, en el que, además, te mueves. así pues, he recuperado el método de la cebolla: camisetilla, blusa y chaqueta. y estoy deseando que lleguen las rebajas, que hay que ver las preciosidades de las nuevas colecciones. y, a mí, ahora, me vuelven a hacer falta. ejem.

blusas de las fotos de Zara.

el sueño del huerto en casa

para esta plantadora de tomates en balcón, el sueño del huerto urbano es un objetivo perseguible. y si, encima, me lo ponen tan fácil y bonito como seedbox, ¿cómo me voy a resistir?

no, aún no he caído en la tentación, que mi vida es, últimamente, complicada para mantener más plantas, pero no será por falta de ideas…

siempre nos quedará París

es posible (y solo posible) que quiera este collar.

(y, sí, he vuelto, pero no sé por cuánto tiempo…).