llegué, vi y triunfé que habría dicho un César.
ya estoy en Madrid, instalada en un precioso piso de contraventanas celestes, con una gatuna y tímida compañera, rodeada de menos ruido del esperado y más vida que en la desierta Murcia de agosto. encantada, ¡vamos!, para qué engañaros. disfrutando de frescas noches de terraza, los preparativos de la Paloma y la comida internacional. y conociendo a gente creativa de fantásticas ideas, abriéndome nuevas posibilidades y, en general, aprovechando este tan ansiado cambio de aires.
mañana os cuento más.
xo
(foto de Ian Parker, 2006).